Rafael
Rafael Santi o Sanzio, también conocido como Rafael de Urbino o
simplemente Rafael nació en Urbino y quedó huérfano a los once ańos. Fue
confiado a su tío Bartolomeo, un sacerdote, y ya entonces comenzó a
mostrar su talento.
Quizás la persona que más le influenció en sus primeras obras fue Pietro
Vannucci, el Perugino. Aprendió y colaboró en su taller donde desarrolló la
representación del paisaje y su exquisita relación con las figuras. Más tarde
se trasladó a Florencia, donde tuvo la ocasión de poder aprender de las
obras de Leonardo da Vinci y Miguel Ángel. Su interés se centró en la figura
y el espacio. El tema más recurrente de su obra es el de la Virgen y el nińo.
En Roma, al servicio del papa Julio II, decoró algunas de las salas del
Vaticano. Allí pintó “La Escuela de Atenas”, en la que la obra se funde con
la estancia aportando profundidad a la misma.
Rafael destacó también como arquitecto, siendo considerado, junto con
Bramante, uno de los mejores del renacimiento.
Rafael llevó el alto renacimiento a su cenit, abrió las puertas del manierismo
y anticipó el barroco.
© Museum Pictoris SL, 2013